21 de agosto de 2007

CHICLES CADUCADOS

Esto de la arqueología siempre me ha subyugado. Me parece increíble que alguien encuentre un hueso de mamut, le eche un vistazo y asegure con aplomo que en septiembre cumplirá cuatro mil quinientos años. Mas aún cuando todavía no sabemos la edad exacta de Sara Montiel. Eso es lo que yo llamo precisión. Ahora el mundo de los seguidores de Indiana Jones anda soliviantado y feliz porque una joven ha encontrado un chicle de cinco mil años ¿A esta chica no le enseñaron en casa a no coger marranadas del suelo? Estaba la alumna en unas excavaciones en Finlandia y, de repente, se topó con ese Trident del Neolítico. Iba a utilizar la marca Bazooka pero no quiero quedar tan antiguo como el descubrimiento que nos ocupa. Fue hallar esa cochinada y armarse el alboroto. Al parecer se pueden apreciar a la perfección la marca de los piños. Algo que se me antoja bastante normal si hablamos de un chicle. Digo yo. No se crean que era de sabor a clorofila o a fresa ácida. Brea de corteza de abedul. Un asco vaya. Pues con todo y con eso la chica anda dichosa y emocionada por haberse encontrado un chicle. Imagínense el día que encuentre novio o novia. Menuda fiestorra. Para haberlo sabido antes. Le hubiera mandado yo a su casa unas cuantas suelas de mis zapatos para que me calculara sus correspondientes aniversarios. No es que quiera yo poner pegas a tan histórico hallazgo, pero se me ocurre que si hay huellas de los dientes de este ser primitivo no tiene porque ser una goma de mascar. Bien pudiera ser que otro de sus congéneres le hubiera atizado en todos los morros con un tronco de abedul y en él se hubiera quedado la marca indeleble del hostiazo. Por poner alguna pega.

3 comentarios:

txilibrin dijo...

Y digo yo, que seguro que te lo habrás preguntado... ¿Con qué hacían los chicles? Yo de pequeña en los campamentos masticaba mucho trigo (creo) y se formaba al final una especie de chicle, que en nada se volvía a deshacer.
Estos neandertales eran la leñe...

Y tengo que decirlo, sino exploto, de pequeña cogía los chicles pegados al suelo y me los comía... Sí, vergüenza debería darme...

cambalache dijo...

¿Masticabas trigo y te comías los chicles del suelo? ¿Qué tipo de alienígena eres? Confiesa. Yo te voy a querer igual

txilibrin dijo...

Si fuese alienígena no estaría tan mal, así sabría por qué me siento tan distinta :D

Ah! Dice un compi del curro (que se ha reído mucho con tu blog) que él ha leído lo de las vacas pero con cerdos, y que cuando los matan te dan el jamón.

Un beso