17 de junio de 2007

La mala memoria de la señora duquesa


Tacita a tacita la señora duquesa amasó una gran fortuna. La leyenda dice que es ricachona por su sangre azul pero además ella siempre ha sido ahorradora y algo ratilla. No sé si recuerdan que cuando supo que el Ayuntamiento daba pasta para renovar las calderas allí estaba ella la primera con la instancia para trincar un dinerito. Ahora le sancionan con una multa de seis mil euros por insultar a unos jornaleros y dice que no se acuerda.

Vamos, que se le va la pinza (no las del pelo que, a la vista está, no las usa). No me hagan mucho caso, pero creo que los especialistas lo llaman memoria selectiva ¿A qué no se le han olvidado los pasos de la sevillanas que con especial gracejo baila en la Feria de Abril? ¿A qué nunca, confundida por estos episodios amnésicos, se ha metido en una buhardilla interior en vez de en el Palacio de Liria? Y todo por seis mil cochinos euros que debe ser la mitad de lo que se gasta su vástago Cayetano en dar de comer a los caballos.

Ya lo dije en su momento y me reafirmo. Yo no estuve de acuerdo con esa protesta cuando la hicieron en su día hija predilecta de Andalucía. Ella se ha desvivido por esa tierra ¿O acaso piensan que tanto bailar sevillanas no dejan en los pies unas ampollas horrorosas? ¿O quizás creen que la ingesta de manzanilla entre fiesta y fiesta no deja secuelas en el cerebro como ahora se demuestra con estos casuales olvidos de la duquesa? ¿No saben que el alboroto de su cabello se debe a las muchas veces que se lleva las manos a la cabeza debido a la preocupación por el bienestar de su Andalucía? Digo 'su' Andalucía en el sentido de afecto no de propietaria de buena parte de la región.

Eso sí, Doña Cayetana posee veintidós cortijos entre Córdoba y Sevilla y más de treinta y cuatro mil hectáreas de tierras ganadas con el sudor de su frente (con las sevillanas también se suda). Los labriegos andaluces, muy tocapelotas ellos, aseguraban que los rendimientos han sido escasos y que utiliza como mano de obra inmigrantes mal pagados. Es una aristócrata amigos ¿qué esperaban? ¿Convenio colectivo y conciliación familiar? ¿Un sueldo digno? Verdaderamente, la duquesa tenía toda la razón. Están ustedes locos. Encima el reconocimiento se lo dio un gobierno socialista. Qué grandeza destila todavía el espíritu de la Transición (que ya huele, por cierto)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Los Chavetas Boys, muy arrimados a la aristocracia ellos, cometieron la payasada de darla el galardón a la duquesa.
Los obreros tenían que haber arremetido contra el gobierno andaluz por la condecoración y por no hacer una reforma agraria con los cortijos de la doña y de otros por el estilo.

paredes

Ya lo cantaba Menese :"Por tierras desconosias pasas fatiga y suores, la tierra donde has nacio pa coto de cazaores"

cambalache dijo...

Buena letra amigo

Anónimo dijo...

Hijo, es que las sevillanas son como montar en bicicleta, cuando aprendes no se te olvida nunca.
Dios, si la manzanilla deja esas secuelas….entonces la cerveza? Que preocupación.
Por cierto, lo de “conciliación familiar” me ha llegado al alma Germán, tu si que sabes…. que injusto es que no te entendamos….
Y que razón tiene Menese....

Saluditos.

cambalache dijo...

La cerveza deja muchas más. Yo la dejé hace años pero los daños, a la vista está, fueron irreversibles. Saludos

Alicia dijo...

Irreversibles??? joer.... creo que aun estoy a tiempo.