25 de marzo de 2007

¿Banderas de España sin Mariano?

Así paga el diablo a quien bien le sirve. La noche de ayer pasará a la historia de España como fecha de uno de los mayores agravios que conocerse puedan. El estadio Bernabéu fue el escenario de esta afrenta. Después de desvivirse por este país, después de quedar para jugar al mus y, ya que has encontrado a tres, organizar una manifestación, después de visionar una y mil veces 'A mí la Legión' para tomar nota de cómo se comporta un patriota, después de todo eso y más, a Mariano no le dejaron hacer ni el saque de honor en el partido. Qué raro se nos hace ver un par de banderas y que Mariano no esté detrás de ellas. Anoche había miles y Mariano no estaba ¿Dónde estaba Mariano? Dolido y resentido. No había digerido el sofocón por lo de Polanco y ya tenía sobre sus espaldas otro disgusto. Algún día se hará justicia con este hombre (no me refiero a las próximas elecciones, que a ver si es verdad, sino a algún busto en una asociación de vecinos de su pueblo o similar). Allí estaba esa marea roja y gualda, ese clamor de 'España, España, España', ese Manolo el del Bombo, gran líder espiritual de la derecha, ese vociferio del 'A por ellos, oé'... Cuando más emocionado estaba con la estrofa el potencial estadista gallego alguien le debió de decir, para acabar de hundirle, que el pueblo se refería a los daneses y no a ZP y sus huestes. Así no hay quien gane las elecciones. La plebe enardecida y Mariano en casa con las pantunflas y el puro. Para más irritación allí estaba Gallardón en el palco, codo con codo con don Felipe, preguntándole si había valido la canasta. Todo el mundo sabe que el alcalde de Madrid es un gran aficionado al fútbol. Cuentan que alguien tuvo que parar un comunicado de Espe en el que cifraba en más de un millón y medio de españoles de bien los que se habían reunido en ese acto de afirmación nacional. Le dijeron que se trataba de un partido y ella debió pensar que, para partido, el suyo y para reinona ella. De haberlo sabido antes ahí la hubiéramos tenido con la bufanda en la cabeza a modo de cachirulo y haciendo los coros a Manolo con unos pompones rojos y amarillos adheridos a sus muñecas. Pues no es nadie la señora marquesa. Al final ni siquiera el resultado pudo aliviar algo la congoja de Mariano. España ganó con ZP en el poder. De todos modos, si alguien es coherente con los gobiernos de todo pelaje, esa es la selección. Sus ridículos no conocen de ideologías. Esté tranquilo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muchos baños de masa, pero no le salen las cuentas.Sabe que la estrategia que se usa no da los frutos deseados.Lo que tu dices, la marquesa le está haciendo la cama, pero llena de pulgas para que no sosiegue.

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