26 de mayo de 2006

La morriña de Berlusconi

Maldita democracia. Con lo que le gustaba a Il Cavaliere contar chistes en las cumbres europeas y lucir los liftings ante los circunspectos jefes de gobierno y ahora le han quitado el juguete a la criatura. Claro que, como el tío tiene pasta a espuertas, pues ha ideado algo que sólo está al alcance del intelecto de unos pocos privilegiados. Se ha hecho construir en uno de sus palacios una réplica del salón de su Consejo de Ministros. Al parecer no falta de nada; bueno tan solo que el ya no es el presidente italiano pero eso a los ricachones como que les viene a dar igual menos a él. Berlusconi llora por las esquinas, ha escrito a todos sus coleguis para decirles o amenazarles con una rápida vuelta al poder. A Zapatero le ha encabezado la misiva con un 'Querido José Luis', es raro que no lo haya confundido con un querido Josemari con los que bien que se llevaban las dos perlas, y le comunica, como a todos, que más pronto que tarde volverá. El mundo entero lo espera con impaciencia. Menos mal que le ha pillado el siglo XXI y no los añorados tiempos del Imperio Romano porque levantar una réplica del Coliseo en el salón y meter a un par de leones hubiera revestido mayor dificultad. Ahora solo le falta contratar a unos cuantos actores en el papel de ministros y montar un gobierno a la sombra de su desgracia. Por lo visto no faltan ni los cartapacios llenos de folios en cada sillón ministerial por si alguno de sus súbditos se le ocurre apuntar la lista de la compra o hacer una quiniela de esas amañadas. De todos modos, para ser justos y ecuánimes, hay que admitir que no todo son ventajas para los archimultimillonarios. Por ejemplo, si en vez de morar en grandes palacios, ocupase una vivienda de protección oficial podrían nombrarle presidente vitalicio de la comunidad de vecinos y así iba matando el gusanillo. Pobre hombre, sólo pensar en su tristeza me estremece. Asquerosamente rico y vanidoso ahí le tenemos apesadumbrado y enjaulado en su propio ego. Era un hombre tan pobre que sólo tenía dinero. Alguien, a buen seguro pobre, acuñó esta cita para consolarse pero vistos los límites de la estulticia uno cree que a veces el dicho lleva toda la razón.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Alfonso XIII, también dijo que volvería pero.....
El amigo Berlus por lo visto ha aumentado su patrimonio una barbaridad en los años de SU gobierno.Es que no se tupen de dinero estos personajes,siempre quieren más.
Los italianos lo saben, y ews vergonzoso que le hayan votado casi la mitad.

cambalache dijo...

Si la verdad es que lo verdaderamente incréible es que los resultados hayan sido tan apretados, pero cuando el pueblo habla sólo queda acatar.