Mira que me lo temía. Me acabó de comprar en Salvador Bachiller una maleta de esas de las buenas con ruedas (ya sé que tienen un nombre anglosajón pero uno es muy del terruño), he cambiado el gorro playero con delfines por uno más moderno, el bañador algo más ajustado que voy rebajando tripa y ya estaba en busca de los billetes de avión de esos que por diez euros te dan la vuelta al mundo y te regalan medio kilo de polvorones y ahora todo se desmorona. En Marte no hay agua y, por lo tanto, tampoco habrá chiringuitos con pescaíto frito ni veraneantes con radiocasettes del tamaño del baúl de la Piquer ni niños que corretean y te llenan los ojos de arena los muy hij...pillos. Cómo siga así me voy a dar cuenta de que no a va a ser tan malo que el planeta rojo (qué erudición) no tenga agua y lo que es mucho peor y más seguro ni siquiera botellines de Mahou. Hace tiempo que andaba yo desvelado cada dos por tres con el asunto porque ya estaba cansado de Cullera y Torrevieja y me quería aventurar en un viaje más exótico. Pero no hay nada que hacer. Veinte instituciones norteamericanas han dictaminado que en Marte, de manera definitiva, no hay agua y yo sin bidé para refrescar las partes no me muevo de casa. Siento gran admiración por los científicos, trabajando por el bien de la humanidad, mal considerados y peor pagados pero he de reconocer que a veces me epatan sus investigaciones. Esta es una de ellas. Pues claro que no hay agua en Marte, si lo sabía hasta yo que lo más científico que conozco es al profesor Bacterio ¿Es que no han visto las cientos de fotos que hay en el internés? Un poquito de racionalidad y canalización de esfuerzos; no se tiren horas, días y años para averiguar lo que todos sabemos sólo con pulsar un botón. Y además, digo yo, que a quien le importa que haya o no vida en Marte si con los atascos que hay en Madrid ya se tarda más de tres horas en cruzar la ciudad. Como para subir hasta allá, llegar exhausto y encima que cuando llegues no haya agua. Un poquito de cordura aunque sean norteamericanos. Por favor
Melis, el visionario que se atrevió soterrar la M-30
Hace 2 semanas
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3 comentarios:
Pa mí que te han engañado para joderte las vacaciones.Si los americanos dicen que no hay agua (créanme),razón para pensar que llevándote un bidé de casa , podrás lavarte tus partes pudendas.
Si tienes buenas dotes artísticas, te puedes fabricar un bidé de lava, y así subes más descargado.Por eso del sobrepeso y los accidentes.
Cambalache yo creo que hubiese sido peor que nos anunciaran que no hay petróleo, eso si que habría sido la puntilla sin solución, en mi fuero interno albergo una esperanzuca de que los dados de la suerte nos despierten un día con el anuncio de procelosos mares de galipote en el subsuelo de Marte. ¡Que gozada poder despedir a los ohbus y recua de criminales gringos con destino a tomar posesión de sus colonias espaciales! ¡Y lo tranquilos y descansados que quedaríamos los demás! Por lo menos el viaje ya los entretendría una buena temporada. Mirándolo bien deberíamos alentarlos a que dejen de perder el tiempo matando desarrapados moros y se dediquen a misiones mas trascendentales, mas acordes con su destino en lo universal, ya que por parte del arbusto tienen línea directa con el allá arriba que la exploten coño, Con la gran cantidad de líquido elemento que a buen seguro tiene esparcido por las galaxias -ese punto que todo lo puede- bien podría insinuarle una nueche –así como el que nun quier la cosa- tres o cuatro sitiucos a poder ser que el más cercano caiga allá por Andrómeda. ¡Paezme a mí que nun ye tanto pidir!
No sería mala idea. En cuanto huelen petróleo allí están fabricándose cualquier excusa para esquilmar. Aunque haya que quitar miles de muertos de encima para encontrar el agujero. Un saludo.
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