17 de marzo de 2009

CAMBIO LECHÓN POR TRAJE A MEDIDA

Don Paquet dice que pagó los trajes pero ni tiene las facturas ni el ticket de las tarjetas. Si hubiera abonado en cash la tienda debería tener los justificantes a su nombre mas, de momento, tampoco aparecen. Por tanto, Camps, hombre joven pero de talante tradicional, se inclinó por el ancestral trueque. Al parecer, Trillo, a quien le han encargado la defensa del presidente valenciano, lo que da idea de la estima que le tienen en Génova, cuenta con un testigo protegido. Un as en la manga. Un vecino jura haber visto entrar en la boutique a don Francesc con unos lechones al hombro y salir con un par de ternos a la medida y unos náuticos para asistir de manera apropiada a la Copa América. Por si no fuese suficiente, el PP ya ha pedido a Granados que el comando Anacleto investigue si el sastrecillo valiente tiene algún primo segundo que vote a los socialistas. Esto no puede ser más que complot de la Federación de Corte y Confección de la UGT en connivencia con las hordas de Ferraz. Trillo, ese hombre que dijo toda la verdad y nada más que la verdad sobre el dramático accidente del Yak 42, acusa al sastre de mentir. Lo cierto es que debe causar gran satisfacción que te acuse de embustero toda una autoridad en la materia. Es como si José Tomás, esta vez el torero no el modisto, te dice que toreas de fábula. Don Federico y el sastre andan a la greña. El que fuera ministro, sabe Dios por qué, asegura que no conoce al sastre y éste asegura que le compró más trajes que Camps. Se acuerda tanto que aporta un dato de singular importancia. La estatura de Trillo le obligaba a subirle los bajos y remeterle las mangas. Por tanto, no descarten que, tras estas acusaciones, se halle el agravante de resentimiento por bajito y cabezón. Eso con Camps no pasaba. Primero porque tiene mejor percha y luego porque se los confeccionaban al milímetro. Eso sí, Trillo los pagaba con su dinero. Todo un detalle.

1 comentario:

paredes dijo...

Por qué no se callará ese ex ministrillo.