McCAIN LO VE CHUNGALÍ

McCain no ve claro lo suyo. Por si esto de las urnas se le da peor que lanzar pepinos en Vietnam se ha hecho acompañar en el último mitin de Arnoldo Schwarzenegger a pesar de la dificultad que tiene presentarlo con ese intricado apellido. El senador, firme defensor sin saberlo de aquel sabio axioma que reza 'para qué vamos a discutir si lo podemos solucionar a hostias', ha llamado a su colega Terminator por si Obama quiere hacer un debate con él en un ring lleno de barro. Desde luego no podemos negar que Arnoldo es una gran baza electoral. Hablamos de un tipo de casi dos metros con unos brazos, ya fofos eso sí, del tamaño de un jamón 5 Jotas. McCain tenía pensado compensar la presencia del músculo con el intelecto pero, por problemas de agenda (en concreto no sabía abrir el cierre), Josemari no ha podido compartir cartel. Además tenía un viaje complicado hasta Ohio ya que se halla en Laponia apenas vestido con unos bermudas y un polo Lacoste para demostrar que eso del cambio climático es una bacalá. A la espera de la transcripción de los gruñidos de la cinta, al parecer Arnoldo habló al enfervorizado auditorio de las virtudes de McCain, con especial mención a la mano que tiene en la fritura de las alitas de pollo, y, principalmente, de lo bien que se lo pasó con Danny de Vito en la mítica peli de los gemelos. Así por lo menos no ganan las elecciones pero se entretienen. Es asombrosa la universalidad que tiene la derecha para convocar a lo más granado de la cultura. McCain recurre a Arnoldo y Josemari lo hacía con Norma Duval y las hermanas Valverde que, dicho sea de paso, son mucho más simpáticas. Menos mal que siempre les queda Amando de Miguel ¿Se acuerdan?