16 de septiembre de 2007

CONDON-ACIÓN DE DEUDA


Me he ido al banco con el recorte de prensa en la mano pero no ha habido manera de convencerles. Ni siquiera me ha servido de nada justificar que no mentía. Por poco me echa a patadas el guardia de seguridad cuando me he comenzado a quitar los pantalones y ha asomado casual y juguetona la tirilla del tanga de leopardo. He tenido que recurrir al 'usted no sabe con quien habla'. Normal habida cuenta que el tipo no me había visto en su puñetera vida. Ah, perdón. Esperen que rebobine. Me ofusco y les privo de datos fundamentales. Pamela Anderson pagó una deuda de póker de ciento ochenta mil euros con favores sexuales. Yo a tanto no aspiraba. Ando algo boquerón y quería liquidar de un plumazo las últimas letras del coche y dos o tres plazos de la Termomix. Una miseria vamos. Pues nada, ya les digo. Me he insinuado a la cajera y en vez de darnos un revolcón sobre los sacos de la calderilla en la cámara acorazada ha llamado a gritos a la policía. A ver si se creía que lo hacía por gusto. Tampoco es que le pidiera estar nueve semanas y media. Con un ratillo, vuelta y vuelta, hubiera sido suficiente para camelarla. Yo, ciertamente, he perdido como 'sex symbol' pero tendrían que haberla visto a ella. Con sus flotadores podría haber salido caminando sobre las aguas en el hundimiento del Titanic y con su bigote haber presentado el Directísimo de José María Iñigo sin que nadie se hubiera percatado. O sea que tampoco estaba para elegir. Además ¿qué ven en Pamela? ¿Acaso no tengo yo también mis protuberancias justo debajo de donde ella tiene las suyas? Por cierto, en mi tripita nada de silicona. Años de dedicación y mucho rebañar la salsa de los callos con la spontex. Todo más natural. Uno ya no se pone camisetas de lycra para que no le confundan con un morcón ibérico pero sigue teniendo sus encantos (qué sí coño, qué sí). Además ella lo hizo por vicio y yo por necesidad ¿No es acaso un eximente? En fin, quizás he sido demasiado ambicioso. Voy a empezar por empresas menores. A ver si me deja ZP los dientes como el Jorge Clooney, sonrío a la cajera del súper y por lo menos me llevo unos san jacobos por la patilla. Por algo se empieza.

9 comentarios:

txilibrin dijo...

Hombre yo si es por tener sexo, digooo, por acabar de pagar mi coche, hago lo que sea, que dicen que en el País Vasco no se folla, pero por aquí menos aún.

Margarida dijo...

Menos mal que pagu� la Themomix en mano...y de un plumazo...

txilibrin dijo...

¿Tenéis Termomix? Qué envidiaaaaaa

cambalache dijo...

Yo tengo la Chef 2000 pero la utilizo para meter dentro los calcetines

txilibrin dijo...

jajajaaj, los calentará bien, ¿no?

Anónimo dijo...

Pues en cierta ocasión me ocurrió que me dijeron "oye ¿Y si...?" y contesté "¡ah! pues mira... manos a la obra" Entonces la cuestión quedó zanjada estupendamente.
César

Anónimo dijo...

A mi me pasó algo parecido cuando fuí al banco a pedir pelas, "me dieron por el culo", sexo al fin y al cabo.

cambalache dijo...

Pues sí, la verdad es que la sodomización bancaria no deja de ser una variante sexual

Virginia dijo...

Que no te veo yo con el tanga aleopardado, Germán, que uno, pese a estar de vuelta de todo, tiene su dignidad¡