21 de julio de 2007

DE DERECHOS Y OTRAS MAMARRACHADAS

Debe ser que el señor juez no tiene cosas mejor que hacer que mandar a los policías a los kioskos para que no veamos una portada que ya hemos visto (este hombre se debe creer que andamos todavía en la época de la Olivetti). Es una pena que hayan cambiado el color de los uniformes de los agentes del orden público. Si todavía fueran grises al menos, quienes estamos en eso que llaman por llamar la madurez, le agradeceríamos habernos devuelto por unas horas nuestra adolescencia. Tiempos duros pero sobrellevados gracias al inigualable oxígeno de la juventud. Días en que te podían dar una hostia en la calle algunas veces por qué sí y otras veces por qué no. A un buen amigo del barrio, con apenas diecisiete años, los siniestros grises le molieron a palos dentro de una furgoneta por llevar en la solapa un imperdible con los colores de la bandera republicana. Espero que no me ocurra lo mismo si la próxima semana me ven con El Jueves debajo de el brazo.

El secuestro de la revista ha atizado el avispero patrio. Unos se llevan las manos a la cabeza por la presunta zafiedad de la viñeta y los otros porque esa misma viñeta haya sido el detonante de este insólito atropello. Yo le diría muchas cosas al señor juez, pero como todavía no he disfrutado de mis vacaciones no me gustaría pasármelas en Alcalá-Meco aunque la pensión completa tenga carácter gratuito. Por eso, si me permiten, se lo diré a ustedes aunque ya saben a quien se lo digo.

Si usted considera denigrante un dibujo es que no sabe lo denigrante que es ser joven, levantarte a horas intempestivas, trabajar doce horas y que te paguen menos de mil euros. Si usted cree ofensivo que se caricaturice a alguien follando o cagando detrás de un matorral es que desconoce lo ofensivo que resulta que te pidan todo tu sueldo miserable por sobrevivir en una buhardilla de treinta metros para poder emanciparte de tus padres. Convendrá conmigo que ni Felipe ni Leti padecen esas ofensas. Quizás si tuvieran que pensar cómo se las ingenian para pagar el próximo mes la hipoteca ni siquiera hubieran tenido tiempo de sopesar si su imagen sale o no sale perjudicada. Derecho al honor, derecho a la intimidad ¿Y el derecho al futuro?

Lo bueno que tienen estas broncas siderales es que, como todos opinamos, uno ratifica su idea de que el volumen de gilipolleces que uno puede leer u oír es prácticamente ilimitado. Un diario hasta publicaba un editorial de urgencia, como si se hubiese desatado la Tercera Guerra Mundial, en el que apaleaba a los autores del chiste por injuriar a la Corona y vilipendiar a los Príncipes. No sé porque me da que a los dibujantes les deben afectar tanto como a mí estas reprimendas.

¿Qué me están contando? ¿Dónde se creen que viven? ¿Quieren que nos pongamos cascabeles en los tobillos para dar volteretas y divertir a la desconsolada princesa Leti? Dios mío, qué intolerable afrenta. Mujeres asesinadas por los cabestros de sus maridos, inmigrantes ahogados a quienes les secuestran sus misérrimas ilusiones, indigentes tiroteados por la policía en los aeropuertos, sueldos de risa, pisos por las nubes y lo denigrante es un chiste. Váyanse a paseo (ustedes no, ya saben).

10 comentarios:

Anónimo dijo...

"Mujeres asesinadas por los cabestros de sus maridos, inmigrantes ahogados a quienes les secuestran sus misérrimas ilusiones, indigentes tiroteados por la policía en los aeropuertos, sueldos de risa, pisos por las nubes y lo denigrante es un chiste."

Esto de más arriba, que has escrito, es inmejorable. Lo mismo digo utilizando tus palabras.
César

cambalache dijo...

Muchas gracias amigo. La verdad es que me parece indignante tanta hipocresía. En fin, estamos en verano disfrutemos de las vacaciones.

Anónimo dijo...

La hipocresía del clero, también se pega a otros estamentos patrios.

paredes

Paco dijo...

Poco más se puede decir. Genial, de verdad.

txilibrin dijo...

Me sumo. Pierden el tiempo censurando una revista y no haciendo cosas más útiles...
Así que nada, ¿hacemos una revolución y nos ponemos a pegar el cartel (pero con 2m de altura) por toda la calle?
Me lo pienso y voy mandando emails para que haya una cadena :D

txilibrin dijo...

cambalache, libro comprado, mitad leido, evaluaré al final :D
Si puedes o quieres mándame un correo (desde mi perfil se puede) y te envío mi crítica :P

Besos

Anónimo dijo...

Las últimas 5 líneas para enmarcarlas. Inclúyelas en tus Greatest Hits
Salu2

cambalache dijo...

Lo haré amigo. Gracias sinceras por vuestras visitas. Un saludo

Anónimo dijo...

Esta hipocresía, como decís, nos rodea. Algunos adalides de la izquierda con los que me rodeo dan muestras infalibles de ello: qué malos son los fachas, qué malos son los de derechas... pero a mí que no me falta la corrida de toros y los pasos de semana santa... Vergonzoso! Y llevan el timón de lo que debería ser el contricante de mis "malos"... me voy a tener que poner a llorar...

Blanca dijo...

Un aplauso por tu síntesis. Yo hubiera tardado varias páginas para decir algo parecido, pero sin tu calidad. Tienes más razón que un santo... entre tantos jueces imbéciles, fachas, retrógrados, meapilas y lameculos parece que estamos volviendo a la época de la oprobiosa que ya creíamos olvidada, pero que va, que va...