23 de agosto de 2006

Pobre Tom

Cómo esta el mercado laboral. La Paramount ha despedido a Tom Cruise. Así, sin expediente de regulación de empleo ni prejubilación ni nada. A la calle. Por lo visto los directivos están más que hartos de que su estrella esté dando vueltas al momio de la Iglesia de la Cienciología y de alardear de carantoñas con su churri, una tal Katie Holmes. Tom siempre ha aparecido con un aire dicharachero; regalando sonrisas con la profusión de un aspersor y sin esconder que es tipo de grandes pasiones. Ya lo vimos con nuestra querida Pe. Era llegar a España y Tom se ponía lenguaraz y asaz simpático cual vendedor de crecepelo. Al parecer con Katie la cosa ya ha llegado a extremos inauditos. En un programa de televisión le preguntaron por sus sentimientos hacia Katie y Tom comenzó a brincar en el sofá dando alaridos de amor. Aullidos de pasión (regalo el título por si hay largometraje). No he visto ese testimonio audiovisual pero me pega que viene a ser una especie de reacción tipo Ricardito Bofill. Por cierto, hace mucho que no se sabe de él. Lo último que conocí, y estoy siempre ojo avizor a sus andanzas ya que el personaje merece desvelos y atenciones, es que había dirigido una película. Creo que regalan el deuvedé con un huevo Kinder pero la oferta está sin confirmar. Aunque no hayan querido, les habrá sido misión imposible (un obvio guiño a la carrera de Tom) no haberle visto hacerse arrumacos con Katie. Era llegar a un estreno, al hiper o a una rifa, ver a los fotógrafos y estrujar a la muchacha como si en vez de ser la mujer de su vida fuese una vileda. Las malas lenguas, que hay muchas y no hablo por mí en esta ocasión, rumoreaban que con estas exhibiciones almibaradas y bastante 'tom'torronas (chiste fácil y excusas), el actor quería salir al paso sobre la incertidumbre que pesaba sobre sus orientaciones sexuales. Pues chico, vaya preocupación. Que Dios reparta suerte. En todo caso, me preocupa el futuro de Tom, si tiene ya arreglados los papeles del paro o si va a ir a juicio por despido improcedente. No sé si en América reparan en estas minucias. El chavalote descalzo no anda, la verdad. De dólares va sobrado, pero no se trata ya de eso; se trata de algo que no se paga con dinero. Se trata de restañar el honor de este Romeo de dentadura impoluta y cara de yerno ejemplar, de defender que el amor no puede ser causa de despido como si llegaras borracho o ficharas a deshora. Yo estoy contigo Tom y con Pe no estoy porque ella no quiere que yo soy hombre sacrificado y si hay que hacer faena se hace. Es lo que tiene pertenecer a 'Latin's Lovers Sin Fronteras'.

No hay comentarios: