30 de abril de 2009

EL POBRE PAQUITO

Esas cosas hay que pensarlas antes Paquito. Eso de ser aspirante a choro y padecer de claustrofobia casa fatal. Nada comparado con la boda de Anita y Agag a la que acudiste hecho un pincel. A Paquito, que fuese don Francisco en los restaurantes de alto copete, le han tenido que llevar en ambulancia al juzgado. No porque hubiera mucha prisa sino porque el hombre no es de espacios cerrados. Y ya se sabe que en el trullo te organizan pocas excursiones por la sierra. Debe ser muy duro estar acostumbrado a que el viento azote tus melenas en la proa de un yate y ahora verte aseándote las pelotas en un bidé. No diré que me alegro de tus sofocones pero tampoco me verás muy compungido. Me caes mal. Rematadamente mal majete. Eres como los Juegos Reunidos de mi infancia. Reúnes en ti mismo todo lo que detesto en un ser humano o lo que seas. La arrogancia, la ambición desmedida, la petulancia, la ostentación, el clasismo, el mirar por encima del hombro al prójimo, el creerse inmortal sentado en la cima del mundo con los pies colgando. Dirás que no te conozco de nada, pero estás muy equivocado. Te conozco del todo. Y ahora eres un pringao que, con paciencia porque tiempo espero que tengas de sobra, aprenderás en el maco a hacer maceteros de macramé o a especializarte en autodefinidos. Ya ves tú. Y no esperes que Anita y Alejandrito vayan a verte para contarte que te han echado de menos en las vacaciones con Briatore. Digamos que para ellos cruz y raya. Un apestado a quien, ni de etiqueta, volverán a dejar entrar en Gabana. Debe ser que soy un resentido social. No digo que no, pero me duele y me indigna que mujeres tan enormes, grandes y bondadosas como mi señora madre se hayan tenido que ganar la vida fregando suelos que pisaban imbéciles como tú. En días como estos es cuando uno celebra que, con todas sus imperfecciones, la democracia sea capaz de poner en su sitio a estos capullos. Ahora quien se va a fumar un puro del mismo tamaño que él que tú te fumaste en el bodorrio de El Escorial soy yo Paquito. Espero que no te moleste el humo. Y si te molesta, te jodes.

2 comentarios:

paredes dijo...

Joder,como has puesto al nene.
Lo queme parece raro es que haya ido al maco , "siendo uno de los suyos".

Paco dijo...

Ojalá Paquito tenga tiempo de leerte en su celda. Me apunto a lo del puro ahora mismo y eso que no leo.

Genial Germán.