EN EFECTO: MANDA HUEVOS

Es preocupante el raquitismo interjeccional del PP. A cualquier barullo, trifulca o contratiempo la exclamación es idéntica. Ese 'manda huevos' que Trillo legó a la posteridad como su más brillante aportación a la vida política de este país creó escuela. Eso o que el encorsetado argumentario de las mentes pensantes de Génova no les deja decir otra cosa. No es baladí la consigna en Chez Mariano. A poco que escuchen la radio o padezcan los diarios sabrán lo que toca. Si se cumple el primer año de Gobierno ZP la soflama es que no hay gobierno. Si del aborto se trata la letanía es que una niña no puede operarse de anginas sin el permiso de sus padres pero sí abortar. Es mentira, pero ¿desde cuando la realidad puede estropear un buen titular? El abc del periodismo. La versión actualizada del mandahuevos, así juntito, le correspondió a Rosa Posada, presidenta de la ya fenecida comisión sobre el Comando Anacleto. Como uno no está sujeto a la consigna diría más. Manda cojones que, en la madurez de la democracia, tengamos que aguantar tan mezquino ejercicio de autoridad, prepotencia y oscurantismo. Cuando dijo Espe que apostaba por la transparencia no le faltaba razón. Lo ha sido tanto que ha dejado ver con total nitidez que una cosa es llegar al poder a través de las urnas y otra bien distinta ser un demócrata. Sólo al 'tonto del Sunsilk' se le puede ocurrir rebuznar que un diario, en cualquier caso mucho más serio y riguroso que él, con todas las objeciones que le queramos poner, es capaz de manipular con tippex unos partes para atacar al Gobierno donde él tiene el pesebre. Eso y más. Como aguantar a funcionarios públicos con aire de putichulos y perdonavidas que van a una comisión parlamentaria con el mondadientes y la mentira en la boca. A estos tiparracos les pagamos con nuestros impuestos. A ellos y a quienes hacen del paripé bandera, tienen mucho que esconder y mucha prisa por guardar la mierda debajo de las alfombras. Ya no hay comisión pero, mucho antes de ello, lo que no hay es vergüenza. Es cierto que con ella no se ganan elecciones pero debe ser que uno tiene la mala costumbre de dormir tranquilo con su conciencia.